mi corazón llace inerte en el suelo hecho pedazos. trato de reanimarlo
pero mis esfuerzos no tienen resultado. la fe y la esperanza son flores
marchitas, que han perdido toda su belleza y aroma. el destino cruel y
macabro me da momentos de alegría y bienestar, para luego castigarnos y
dejarnos hundidos en el fango putrefacto. nuevamente vuelvo a sufrir los
duros golpes de la vidas tras dos meses de prosperidad económica,
gracias a un nuevo trabajo nuevamente paso a engrosar las listas del
paro. vuelta a la preocupación, a la ansiedad y a no dormir, espero que
esta situación sea pasajera y pronto regrese a trabajar.
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